Estoy
haciendo otra vez de guía turístico para mi hermana Ingrid.
El
martes por la tarde la llevé a Cala Deià.
Hacía
mucho tiempo que no había visitado a esta pequeña cala.
Los
paisajes están preciosos después las primeras lluvias de otoño.
Surgen
los verdes y los arboles han quedado muy limpios.
El
torrente que corre al lado del último tramo del camino llevó bastante agua para
verter la en el mar.
Debía
ser trabajoso construir y usar los “garajes” para los barcos en la roca.
La luz
de tarde era muy agradable y dejaba
sus reflejos dorados en el agua.
2 comentarios:
Unas fotos maravillosas de una maravillosa cala
Un abrazo y buen finde
j
Es preciosa, me encanta. Besos.
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