mallorca es así también

Ya soy pensionista y sigo buscando caminos para expresarme, como durante toda mi vida. Ahora tengo una gran ventaja: más tiempo y más libertad. Lo mio es la naturaleza a la que tengo un tremendo respeto, este dónde este.
Desde hace más de cincuenta años soy Mallorquina venida de Alemania. En estos años he visto como hemos transformado esta isla tremendamente y sin piedad. Aun así sigue siendo una verdadera joya y quedan muchos sitios dónde la naturaleza aún está intacta.
Son estos sitios, tanto en la costa como en el interior de Mallorca, los que más me atraen. Con los años que disfruto de esta isla y su preciosa naturaleza, aún le encuentro algo nuevo cada día. A veces es un paisaje que me asombra, a veces una flor en el camino que me cautiva y muchas veces se trata de cositas diminutas, que me dicen lo mucho que aún me queda por ver.
Despues de empujoncitos que me dieron algunos amigos para que muestre mis fotografías, me atrevo a iniciar un blog. El objetivo es dar a conocer mis imagenes a las personas a quienes les apetezca.


miércoles, 18 de septiembre de 2013

Cap Enderrocat - Puesta de sol vallada

Me había enterado de que Cap Enderrocat ya no es zona militar.
Invité a mi hermana Ingrid a visitar el lugar y de paso observar la puesta del sol.

No se podía pasar.
Alguien se ha hecho con la antigua fortificación. Esta transformada en un hotel y tiene el acceso como particular.
El guarda nos dijo que podíamos ir por un caminito de cabras hasta la costa.

Nos encontramos un gran tramo de costa vallada hasta un punto donde ya no se puede costear por haber un acantilado.
En este punto  estaba retirado un trozo de la valla y se podía acceder a un caminito estrecho que bajaba hasta las plataformas rocosas a ran de mar. No bajamos pensando en la posterior subida y no habíamos traído linterna.

Hemos visto que han acondicionado una bajada particular desde el hotel.
Hemos visto que han hecho allí una plataforma de hormigón.
Había mesas preparadas con copas.
Nos quedamos arriba esperando la puesta del sol.

Mientras tanto iban bajando alguna gente a pie y otros con vehículos desde la fortificación -  hotel.
Se acabó nuestra tranquila contemplación de los últimos rayos de luz.


La gente selecta del hotel de lujo se habían puesto muy contentos y celebraron a voces, gritos, risas y brindando durante el espectáculo de la naturaleza a su manera.











1 comentario:

Jesús Dorda dijo...

Me temo que el respeto a la ley de costas depende del dinero que haya detrás...
Saludos