CEMENTERIO DE SÓLLER

Hay cementerios que son tan bonitos o más que algún parque. El año pasado uno de los días que quise visitar el jardín botánico de Sóller lo encontré cerrado. No me había pensado a tiempo que era lunes, día de descanso para ellos. Entonces fui a visitar el cementerio en su lugar, ya que un amigo me había recomendado este lugar. Y de verdad me gustó mucho. Esta situado en la ladera de un monte muy cerca del centro de Sóller. Es muy bonito por las vistas que tiene. Los árboles viejos y grandes son impresionantes. En la parte antigua del cementerio hay tumbas, cruces, esculturas, lapidas, piedras y jardineras con patina de años pasados a la intemperie. Se pueden observar infinidad de detalles bonitos, curiosos y hasta emocionantes. Y también esta presente esta sensación de paz y tranquilidad típica y el olvido necesario del lugar. Luego hay flores recientes, de días y de estas que llevan exclusivamente para el uno de noviembre. Y esta fecha para memorizar a los muertos es como otras tantas fechas impuestas por costumbres o conveniencias. Todo se quiere (para algunos es decir se debe) hacer el mismo día y concentrado cuando hay tantos días del año para poder practicar el culto a los muertos. Las floristerías no tendrían que hacer a la fuerza el agosto en noviembre, ni habría estas afluencias en masa en el mismo día de los muertos.