mallorca es así también

Ya soy pensionista y sigo buscando caminos para expresarme, como durante toda mi vida. Ahora tengo una gran ventaja: más tiempo y más libertad. Lo mio es la naturaleza a la que tengo un tremendo respeto, este dónde este.
Desde hace más de cincuenta años soy Mallorquina venida de Alemania. En estos años he visto como hemos transformado esta isla tremendamente y sin piedad. Aun así sigue siendo una verdadera joya y quedan muchos sitios dónde la naturaleza aún está intacta.
Son estos sitios, tanto en la costa como en el interior de Mallorca, los que más me atraen. Con los años que disfruto de esta isla y su preciosa naturaleza, aún le encuentro algo nuevo cada día. A veces es un paisaje que me asombra, a veces una flor en el camino que me cautiva y muchas veces se trata de cositas diminutas, que me dicen lo mucho que aún me queda por ver.
Despues de empujoncitos que me dieron algunos amigos para que muestre mis fotografías, me atrevo a iniciar un blog. El objetivo es dar a conocer mis imagenes a las personas a quienes les apetezca.


martes, 11 de octubre de 2016

Argiope bruennichi - araña tigre - naciendo


Desde que publiqué mi última entrada sobre las arañas (el 14 de septiembre) habían pasado por encima de los cocón de la araña tigre o Argiope bruennichi dos tormentas de fuertes lluvias.
Mientras tanto, ya no habíamos visto mas ni rastro de la madre ni de las pequeñas.

La mañana del 25 de septiembre  mi marido me avisó que estaban saliendo las arañitas del último cocón que había tejido la araña madre bastante tiempo antes.
Cogí un taburete bajo para poder estar sentada a una altura que coincidía con la altura donde estaba colocado el cocón colgado al lado de la Muehlenbeckia.

He ido con mucho cuidado para no tocar la red que ya estaba bastante estropeada.
Luego hice las fotos con la cámara réflex y el objetivo macro. 



 La Ooteca o cocón mide 2 centímetros justitos y en la parte inferior hay un agujerito de donde “veían la luz” las pequeñas.
Quería que en las fotos se pueda apreciar a lo máximo como salían las arañas diminutas una tras otra muy seguidas. Era gracioso, asomaban dos patitas moviéndolas al aire y ya saltaban a fuera.



Se formaban tres cúmulos en forma de bola de arañitas. Cuando se toca un hilo de los envolventes los animalitos se dispersan con rapidez y al cabo de unos minutos se vuelven a reunir.








Estuve fotografiando y mirando durante más de una hora y lo dejé. Ya no podía más porque mi tren de aterrizaje protestaba a tope. Además ya se habían ido casi todas las nubes y el sol calentaba lo suyo.
He disfrutado a tope.
Era una emoción tremenda y una aventura no vivida antes por mí.


Cuatro horas mas tarde hice esta última foto...

2 comentarios:

nubeaguablog dijo...

No tengo palabras , una auténtica maravilla... que estamos destruyendo con eso que llamamos progreso.
Un abrazo
j

Teresa dijo...

Muy buen reportaje. Me encantan Erna. Besitos.