Según que cerramientos pueden parecer prisiones en ocasiones. El caballito que estaba detrás de esta alambrada no parecía sufrir por estar allí dentro. Todo lo contrario, daba la sensación de paz y tranquilidad entre medio de los naranjos y margaritas.......




Gracias, por transmitir a todos la belleza que observas en la naturaleza, atravez de ellas nos demuestras tus ganas de vivir y nos mandas tu energia.
ResponderEliminarBesitos Sylvia