ARISTOLOCHIA GIGANTEA

Tienen plantas muy raras y curiosas en la jardinería de mis amigos.
Esta tarde hice las fotos de esta Aristolochia gigantea.
Es muy llamativa con flores enormes pero no me apetece tener la en el jardín.
En su cara tiene una boca con garganta amarilla muy atrayente que da a la bolsa trampa.
Abri una flor a lo largo de su bolsa atrapabichos para verla por dentro.

AGALLAS - enigmas

Quise ver lo que hay dentro de estas pequeñas “bolitas” que se llaman agallas y se encuentran pegadas en algunas plantas y árboles.
Lo malo es, que antes de buscar información en Internet, cogí un Cutter y corté algunas por la mitad para hacerles una foto.
Por lo visto me he convertido en asesina de animalitos, casi seguro de unas avispas pequeñitas.
Bueno, para consolarme lo llamo sacrificio al servicio de la ciencia.
Si miráis picando encima las fotos, para verlas en grande se puede apreciar algunas larvas.
Es increíble lo que hace la naturaleza para convertir la reacción y el material de las plantas para dar cobijo a estas larvas.
...........

Ahora ya he leído mas sobre las agallas y por lo visto se trata de Cynipidae, unas avispas gallaritas.

PINCELES NUEVOS

Estaban inspirados y decoraban el cielo con pinceladas así de suaves…

AGUJEROS OLVIDADOS

Tienen algo fascinante los agujeros en las piedras.
Casi como los de las rocas.
Los agujeros de hoy son detalles de partes arquitectónicas antiguas.

Los del cielo azul están elaborados en unas piedras enlazadas en una pared para sostener los goznes de una puerta ya inexistentes.
Las incrustadas en los muros de piedra de bastantes edificaciones rurales o de pueblo antiguas tenían una utilidad múltiple.
Los agujeros en tales piedras casi siempre eran productos de la misma naturaleza.
Algunas eran simplemente para atar un animal, para colgar algún útil o también para hacer de embudo para guiar el agua de lluvia a la canal de una cisterna y problemente servían para más cosas.